La Negra es una artista de esas que saben ampliar los límites del flamenco. Amparo Velasco agitará mañana en el Teatro Cervantes de Málaga una coctelera musical llena de inspiración jonda, mucho jazz y una buena dosis de ritmos latinos y africanos. El armazón de su actuación estará construido con los temas de su tercer álbum, Colores, un compendio de mestizaje que incluye desde la frescura de singles como Parar hasta versiones heterodoxas del Como el agua de Camarón o canciones con letras de García Lorca, como Concierto interrumpido. La Negra acudirá al primer teatro malagueño (20.00 horas del martes 11, 15 euros precio único) con su inseparable Juan Fernández ‘Panky’ a la guitarra, Oliver Sierra al bajo, Isidro Suárez a la percusión y coros y el malgache Kilema aportando los aires exóticos con el tañido de la valiha y el marovany (una cítara tubular y un cordófono típicos de su isla).
Colores, publicado por Martin Music, el nuevo sello discográfico de Paco Martín, este mismo año, es el argumento de su puesta en escena más ambiciosa. La Negra es conocida por la intensidad de sus conciertos y la capacidad de crear una atmósfera de comunión constante, y Juan Fernández ‘Panki’ le ha diseñado un traje a su medida con temas rápidos y movidos con la intención de que sus directos tengan aún más fuerza, como reconoce ella misma. “La Negra viene más fuerte que nunca”, dice, y asegura a la vez que Colores se llama así “por su versatilidad” y los matices que contiene. Porque su música es el producto de una fusión natural, sin posturas forzadas, con un guión bien marcado pero sin perder de vista su identidad y su capacidad de improvisación.
